Es un hecho conocido que las pulgas y las garrapatas son un verdadero fastidio para nuestras mascotas. Pero ¿realmente entendemos el nivel de riesgo que implican? Estos ectoparásitos no solo generan molestias y heridas en la piel a través de sus picaduras, sino que también son capaces de actuar como vectores, transmitiendo graves enfermedades a nuestras mascotas. Además, muchas de estas enfermedades son zoonóticas, es decir, que se transmiten también a las personas, representando un peligro para toda la familia.
Como hemos visto en anteriores artículos, los cambios demográficos, la globalización y el aumento de la temperatura global han favorecido la distribución mundial y la presencia de estos parásitos vectores durante todos los meses del año. En resumen, es de gran importancia implementar una de los parásitos externos durante todo el año, con el fin de preservar la salud de nuestras mascotas y proteger también nuestros hogares.
¿Qué enfermedades pueden transmitir las pulgas y las garrapatas*?
Una de las enfermedades más comunes que transmiten las pulgas es la dipilidiasis. Esta enfermedad, la cual afecta a perros y gatos, y, en ocasiones a humanos, especialmente a los niños, muchas veces pasa desapercibida. Pero, en los casos más graves, el animal puede presentar picazón en la zona del ano, dolor abdominal, diarrea o estreñimiento, y pérdida de peso.
La bartonelosis de perros y gatos es otra enfermedad transmitida por ectoparásitos. Esta es de especial importancia ya que se trata de una zoonosis, produciendo la llamada “enfermedad del arañazo del gato”. Los signos clínicos más comunes en gatos son fiebre, aumento de tamaño de los ganglios linfáticos, inflamación en los ojos y las encías, y posible anemia. En perros, pueden producirse problemas en el corazón, el sistema nervioso, e inflamación de los vasos sanguíneos de diferentes órganos.
Por otro lado, aunque la mayoría de las enfermedades llamadas rickettsiosis se transmiten por garrapatas, también pueden ser transmitidas por pulgas. Las rickettsiosis pueden causar fiebre, falta de apetito, decaimiento, cojera y dolor muscular.
Las garrapatas también transmiten otras enfermedades muy peligrosas que pueden poner en riesgo la vida de perros y gatos, como son la enfermedad de Lyme, la ehrlichiosis, y la babesiosis. En estas, se pueden observar signos usuales como fiebre, debilidad, disminución del apetito y pérdida de peso; pero para casos graves, estos signos pueden conllevar al fallecimiento del animal, dependiendo de su estado general. Además, muchas de ellas son consideradas zoonosis, provocando en las personas síntomas que van de leves a graves, llegando incluso a la muerte.
En los últimos años, se ha incrementado la distribución geográfica de los parásitos externos, así como su incidencia en las épocas más frías del año. Además, tanto las pulgas como las garrapatas han adaptado su modo de vida al de nuestros peludos, y durante el invierno pueden adherirse a su piel y vivir en el interior de nuestros hogares. Por lo tanto, estos ectoparásitos son capaces de reproducirse, alimentarse y multiplicarse de forma eficaz durante todos los meses del año a costa de nuestras mascotas y, en ocasiones, de nosotros mismos.
Por estos motivos, es importante prevenir y tener protegidas a nuestras mascotas frente a los parásitos externos durante todos los meses del año.
¿Cuál es la mejor forma de proteger a nuestras mascotas durante todo el año?
La prevención continua es la clave para proteger a nuestras mascotas de los parásitos externos y con Bravecto® podrás hacerlo de manera fácil a lo largo de todo el año.
Bravecto® es un antiparasitario externo que con una única dosis proporciona protección durante 12 semanas, con una acción rápida, que comienza a eliminar los parásitos en solo 2 horas y logra una completa eliminación del 100 % de las pulgas y garrapatas en 12 horas. Con esta rapidez de acción, la posibilidad de que las pulgas y garrapatas transmitan enfermedades graves a nuestras mascotas se reduce considerablemente, ya que los parásitos son eliminados antes de que puedan transmitirlas.
Recordemos que los parásitos externos son capaces de sobrevivir en el entorno. Para el caso de las pulgas, aproximadamente el 95 % de ellas se encuentran en formas inmaduras en el ambiente; esto implica que tienen la capacidad de infestar nuestros hogares y reinfestar a nuestras mascotas de manera persistente. Por tanto, es esencial eliminarlas de forma continua en todas las etapas de su ciclo vital.
Con una sola dosis de Bravecto® conseguimos romper el ciclo de vida de los parásitos. La larga duración de 12 semanas del efecto no solo elimina los parásitos que afectan al animal, sino también aquellos que se encuentran presentes en el ambiente. Gracias a Bravecto®, podemos tener la tranquilidad de que estamos protegiendo a toda nuestra familia y hogar de estos parásitos molestos y potencialmente peligrosos.
Recuerda incluir la protección de Bravecto® en el plan de mantenimiento de la salud de tus peludos.
*Enfermedades no presentes en todos los países de Latinoamérica.