El término “zoonosis” hace referencia a las enfermedades que pueden transmitirse de los animales a los seres humanos, ya sea de manera directa a través del aire o de la saliva, o de manera indirecta a través de un vector, otra especie, como mosquitos, pulgas y garrapatas, que transporta el patógeno.
Es importante que sepas que no todas las enfermedades que transmiten las pulgas y garrapatas a tu perro pueden afectarte a ti también. Sin embargo, existen algunas que sí son transmisibles. Para proteger la salud de tu perro y la tuya, debes tomar las precauciones necesarias para mantener a tu mascota libre de estos parásitos.
¿Qué enfermedades pueden transmitirte las garrapatas presentes en tu perro?
Los dos tipos de garrapatas que se encuentran en animales domésticos son las duras (ixódidos) y las blandas (argásidos). Ambas transmiten enfermedades que afectan a perros y a seres humanos.
Entre las enfermedades que podrían afectarte se incluyen las siguientes:
- Ehrlichiosis, causada por la bacteria Ehrlichia canis, es la enfermedad transmitida por garrapatas más grave para los perros. En humanos, los signos de la enfermedad aparecen alrededor de 10 días después de la picadura de la garrapata y son similares a los observados en los perros. La inmunidad de la persona se ve comprometida, lo que puede desencadenar infecciones secundarias como la neumonía.
- Anaplasmosis, causada por la bacteria Anaplasma phagocytophilum. Esta bacteria tiene un importante potencial de transmisión a los humanos y las garrapatas presentes en tu perro pueden hacerlo fácilmente. Los signos en personas son parecidos a los que se pueden observar en perros e incluyen dolor en la espalda baja, fiebre y problemas gastrointestinales.
- Babesiosis, causada por el parásito Babesia spp. En algunos casos es potencialmente mortal. La mayoría de los signos tienen una duración de una a dos semanas, pero la fatiga puede persistir durante varios meses, los más característicos son fiebre alta, dolor de cabeza, escalofríos, dolores articulares y musculares.
- Borreliosis o enfermedad de Lyme, causada por bacterias de la especie Borrelia burgdorferi. Los signos que delatan esta enfermedad en humanos son fiebre, dolor de cabeza, fatiga y erupciones cutáneas.
- Fiebre manchada, provocada por bacterias del género Rickettsia, que parasitan las células de perros y humanos. Los principales signos de esta enfermedad son el dolor de cabeza intenso, agotamiento, dolores musculares y erupción en la piel.
¿Y qué enfermedades pueden transmitir las pulgas?
Como sucede con las garrapatas, la presencia de estos parásitos en nuestro perro puede poner en riesgo también la salud de las personas. Las enfermedades que pueden transmitir son las siguientes:
- Dipilidiosis, producida por Dipylidium caninum, un parásito intestinal. La infección se produce por la ingesta accidental de una pulga infectada, lo que explica porque es más frecuente en niños, ya que tienen un contacto más estrecho con las mascotas. Aunque habitualmente no causa signos, es frecuente observar fragmentos del parásito en las heces. En ocasiones produce malestar general y problemas gastrointestinales, entre otros.
- Fiebre manchada transmitida por pulgas, causada por Rickettsia felis. El contagio se produce cuando el lugar donde la pulga pica se ve contaminado por las heces del parásito. Los síntomas suelen ser poco específicos e incluyen fiebre, erupciones, dolor muscular y articular, dolor de cabeza y fatiga.
- Bartonelosis, esta enfermedad está causada por bacterias del género Bartonella spp. En general, es una enfermedad mucho más frecuente en gatos, que puede transmitirse a los seres humanos mediante el arañazo, sobre todo a aquellos con compromiso del sistema inmunitario. La transmisión por parte de los perros se produce por mordedura y es menos habitual, aunque posible.
¿Qué podemos hacer para prevenir las zoonosis?
Mantener a tu perro libre de pulgas y garrapatas es crucial para evitar la transmisión de enfermedades a ti y a tu familia. Por eso, te recomendamos que prestes atención a cualquier indicio sobre la presencia de estos parásitos y sigas una pauta de desparasitación adecuada.
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Recuerda que siempre es aconsejable que hables con tu veterinario antes de comenzar este o cualquier tratamiento.